LETRAS DEL DISCO
1.
El Hombre de Paja
Era por la noche y se vio caer
Con una gran piedra amarrada a los pies.
Allí terminaron todos sus temores,
A manos de dos gigantescos matones.
Comenzaba el invierno en la fría ciudad
Y del trabajo lo echaron sin avisar;
Su mujer le dijo: “me largo de aquí,
Creo que hay una vida mejor para mí”.
Un amigo abogado un día le llamó,
Y un interesante negocio le ofreció.
Al considerar su triste situación,
Ya no tengo nada que perder pensó.
Una empresa endeudada en algunos millones
No podía responder a sus acreedores.
Pusieron su firma en los papeles para
Que los peces gordos no dieran la cara.
El hombre de paja por un sueldo al mes
Les decía a todos, “de esto, yo no se”.
A su casa a menudo le iban a entregar
Citaciones la policía judicial.
Pero un día los que a su puerta golpearon,
En una furgoneta se lo llevaron
A una nave industrial en un muelle cercano
En donde le ataron los pies y las manos.
Ellos le decían “¿Nos vas a pagar?”
Hasta que se aburrieron de tanto golpear.
Después de cortarle con una navaja
Se dieron cuenta que solo era un hombre de paja.
El hombre de paja por un sueldo al mes
Les decía a todos, “de esto, yo no se”.
2.
De Puerto en Puerto
Como aquel viento que viene subiendo
Cruzando por el mar
Tengo mis alas de plumas de cuervo,
Para empezar a volar.
Renuncio al cielo y también al infierno
Quiero la tierra mojada,
Las hojas secas que barre el invierno
En las frías madrugadas.
Mañana parto, voy de puerto en puerto
Por mares desconocidos,
No me interesa llorar a los muertos,
Pues ellos ya se han dormido.
Yo quiero ser como el aire del cerro
Que llega por la mañana,
Como el rocío, el ladrido del perro
Que cruza puertas cerradas.
Cuando el sol muera tras de las montañas
Y se sumerja en el mar,
Enterraré mi pasado en la playa
Pues no lo puedo llevar.
Mañana parto, voy de puerto en puerto
Por mares desconocidos,
No me interesa llorar a los muertos,
Pues ellos ya se han dormido.
Como aquel viento que viene subiendo
Cruzando por el mar
Tengo mis alas de plumas de cuervo,
Para empezar a volar.
3.
Ventanas Borrachas
La lluvia golpea las ventanas,
Borrachas de beber tantos inviernos,
Y crujen los tejados en la noche
Apretando sus dientes al silencio.
Y ya había dejado de pensarte,
De perseguir tus pasos trasnochados,
De acordarme que existen los fantasmas,
Y sus rostros se me habían olvidado.
Al horizonte negro del olvido
Me voy como un sonámbulo dormido,
Aburrido de tanto despertarse;
Y volveré a los brazos de la niebla,
A las calles que rugen de nostalgia
Y al invierno que vino ahora a quedarse.
Hoy he creído verte entre la lluvia,
Por un pequeño instante solamente,
Sería un espejismo del recuerdo,
O es que quizá también la lluvia miente.
Y ya había dejado de pensarte,
De perseguir tus pasos trasnochados,
De acordarme que existen los fantasmas
Y sus rostros se me habían olvidado.
Al horizonte negro del olvido
Me voy como un sonámbulo dormido,
Aburrido de tanto despertarse;
Y volveré a los brazos de la niebla,
A las calles que rugen de nostalgia
Y al invierno que vino ahora a quedarse.
La lluvia golpea las ventanas,
Borrachas de beber tantos inviernos.
4.
Tierra que se Expande
Cuando tu mirada sea
Tierra que se expande,
Paisaje de mil balcones,
Yo vendré a buscarte.
Y después de vivir muchas
Noches de guitarra,
Me olvidaré para siempre
De soltar amarras.
Porque los destinos cruzan
Mares inclementes
Y llegan por todas partes
Gaviotas celestes.
Porque los destinos hablan
De casualidades
Y en ningún lugar se han dicho
Todas las verdades.
Los gorriones de tus manos
Alzarán el vuelo
Y me dormiré en las ramas
Dulces de tu pelo.
Porque aunque nada se diga
Ya todo se sabe
Y en mi bahía cerrada
Quemaré mis naves.
Porque los destinos cruzan
Mares inclementes
Y llegan por todas partes
Gaviotas celestes.
Porque los destinos hablan
De casualidades
Y en ningún lugar se han dicho
Todas las verdades.
Cuando tu mirada sea
Tierra que se expande,
Paisaje de mil balcones,
Yo vendré a buscarte.
5.
La Noia de la Mar
Somiaré amb tu, noia de la mar,
I amb l’escuma blanca,
Q’acaricia els teus peus, l’ànima del silenci
Va volar al teu coixí,
I s’adorm amb la teva ombra,
I s’adorm amb la teva ombra.
Quan vaix cridar el teu nom, a un somni,
La lluna em diu que teníes
Pena de la mar, d’una gavina,
Del peix llençat a la sorra i que mor.
I entre les roques el sol s’amaga
I un fantasma d’un altre temps
S’acosta a enredar-se entre les ombres
Del capvespre del teu cabell.
Però jo et miro i les ones volen
Cap els meus ulls ensorrats
I el vent de la mar
Portarà els vaixells enfonsats
A visitar el teu port.
El teu port oblidat
Entre les meves coses velles
Et porto a la meva mirada
Passatgera de viatger mort.
Somiaré amb tu, noia de la mar
I amb l’escuma blanca.
Però jo et miro i les ones volen
Cap els meus ulls ensorrats
I el vent de la mar
Portarà els vaixells enfonsats
A visitar el teu port,
el teu port.
6.
Plaza Sanllehy
Es media noche en un banco
En la plaza Sanllehy,
La luna llena recuerda
Un resplandor carmesí,
Es media noche en un banco
En la plaza Sanllehy.
Un hombre lobo se esconde
De las miradas humanas,
En su peludo semblante
Han florecido las canas
Un hombre lobo se esconde
De las miradas humanas.
Un gato negro se cruza
Por los pies de la ciudad,
Todo lo que ahora es mentira
Antes pudo ser verdad.
La plaza Sanllehy susurra
Una tonada anarquista,
Y la luna llena grita:
¡Vivan los sindicalistas!
La plaza Sanllehy susurra
Una tonada anarquista.
Los fantasmas de la guerra
Descubren que son hermanos
Y la luna llena grita:
¡Vivan los republicanos!
Los fantasmas de la guerra
Descubren que son hermanos.
Un gato negro se cruza
Por los pies de la ciudad,
Todo lo que ahora es mentira
Antes pudo ser verdad.
La luna llena recorre
Las calles de Barcelona
Y captura los secretos
De alguna muchacha sola,
La luna llena recorre
Las calles de Barcelona.
La plaza Sanllehy recibe los
Primeros rayos del sol
Y un hombre lobo comienza
A entonar una canción,
A entonar una canción,
A entonar esta canción.
7.
El Velero Desierto
Van andando los relojes
Sin moverse de la mesa
Y se tragan las ciudades
Que se mueren de tristeza.
En blanco y negro quedaron
Las canciones de Gardel,
Hay quienes no les importa
No tener dónde volver.
El viento no se detiene,
Nunca dice a dónde va,
Tampoco de dónde viene.
Como un velero desierto
Volveré, pero jamás
Tendrán ya mis velas viento.
Soñando con otras tierras
Vuelan las palomas grises
Y un incendio de paisajes
Son sus ojos infelices.
El viento barre las calles
Con sus pisadas perdidas,
Donde duerme mi guitarra
Allí tengo mi guarida.
El viento no se detiene,
Nunca dice a dónde va,
Tampoco de dónde viene.
Como un velero desierto
Volveré, pero jamás
Tendrán ya mis velas viento.
8.
La Balada del Increíble Tragasables
En aquel tiempo había en un circo ambulante
Uno que todo tragaba por detrás y por delante.
Por mucho que yo les cuente, por mucho que yo les hable,
No podrán imaginar al increíble tragasables.
El circo se montó a las afueras de un barrio
Y la función de esa noche se anunciaba por la radio.
La carpa quedó instalada al lado de un basural,
Donde unas enormes ratas tenían allí su hogar.
Pasen a ver, pasen a ver nuestro número estelar,
El tragasables se traga un sable descomunal.
Como todo en la vida de aquel hombre discreto,
El tragasables tenía un romance secreto
Con la mujer barbuda, que era tan decadente
Como el payaso borracho que le robaba a la gente.
La mujer barbuda era un transexual que tenía
Por transformarse en mujer, una enorme fantasía.
Rellenó con silicona ahorrando algún dinero
Sus ahora grandes tetas y su peludo trasero.
Pasen a ver, pasen a ver nuestro número estelar,
El tragasables se traga un sable descomunal.
Las imagen de esa señora no era nada convincente
Pues los pelos le seguían creciendo descaradamente
Y nunca pudo vestir por su pene de luto
Y aún conservaba intacto su viril atributo.
Y por eso al tragasables le llamaban así,
Dentro del escenario, como fuera de allí.
Y un buen día el tragasables descubrió con horror
Al travestí que amaba en los brazos de otro amor.
Pasen a ver, pasen a ver nuestro número estelar,
El tragasables se traga un sable descomunal.
El circo inauguraba esa noche la función
Con la puesta en escena de un dudoso león
Que por melena usaba a falta de otra cosa
Una peluca rubia, gastada, de alguna moza.
Y enfrentándose a la fiera un valiente domador
Que mareaba a los niños con su tufo de alcohol;
Fustigaba con el látigo a ese puma fiero
Y hacía que la peluca le quedara de babero.
Pasen a ver, pasen a ver nuestro número estelar,
El tragasables se traga un sable descomunal.
Y así llegó el momento del número estelar,
El tragasables causaba una expectación general;
Pues su arte lo aprendió, según solía contar
De un fakir jubilado cerca de Afganistán.
Sacó el sable de una funda de piel de serpiente,
Mientras todos le observaban como a alguien que miente.
Y en ese instante las luces se atenuaron de pronto
Y el público pasó de estar escéptico a absorto.
Aquel sable se veía mucho más grande que él
Y lo increíble era que a él le pudiera caber;
Entonces el tragasables musitando una canción,
Ante todos, lentamente, se atravesó el corazón.
Pasen a ver, pasen a ver nuestro número estelar,
El tragasables se traga un sable descomunal.
9.
El Reino de los Gatos
En el reino de los gatos
La lluvia empieza a caer,
Dicen que cuando alguien entra
No sabe cómo volver.
En el reino de los gatos
Los grises ladrillos son
Puertas a patios secretos
Si uno entona una canción.
Aquí vivo yo
En un mundo
Que desapareció.
Si quieres venir
Te doy una llave
Para cuando te quieras ir.
El idioma del invierno
Lo aprenden nuestros sentidos;
Los gatos son soberanos
De un viejo reino perdido.
Aquí vivo yo
En un mundo
Que desapareció.
Si quieres venir
Te doy una llave
Para cuando te quieras ir.
10.
La Casa de mis Abuelos
La casa de mis abuelos
Es blanca y tiene
Un jardín que florece
En cada primavera
Y que adentro mío crece,
Allí donde
Cada tarde me esperan.
Antes, cuando niño,
Boquiabierto,
Sentado en la cocina
Escuchaba al viejo aventurero
Sacar historias
De adentro de su sombrero,
Mientras mi abuelo cuenta,
Sus fantasmas
Van entrando por la puerta.
Los viejos personajes
Me hacían un guiño
Y me invitaban
A entrar en sus parajes.
Dentro de esa piel vivía
Un joven corazón en rebeldía.
Los verdes bosques del sur,
La lluvia eterna
cayendo en la memoria,
los bandoleros
se pierden en cada historia
cabalgando
por ocultos senderos,
mientras mi abuelo cuenta,
mi abuela dice
que él todo se lo inventa.
Mi abuela recordaba
Que cuando se casaron
Los botes del río se iluminaron,
Dentro de esa piel vivía
Una muchacha enamorada todavía.
La casa de mis abuelos
Es blanca y tiene
Un jardín que florece
En cada primavera
Y que adentro mío crece,
Allí donde ellos siempre me esperan.
Los viejos personajes
Me hacían un guiño
Y me invitaban
A entrar en sus parajes,
Dentro de esa piel vivían
Dos jóvenes amantes todavía.
11.
El Puente del Diablo
Una oscura neblina
Vuela una golondrina
sobre el Puente del Diablo.
Traen al prisionero,
Un pirata, un guerrillero
Ante un verdugo macabro.
En el puente del Diablo….
Cabezas de rebeldes
Rodando por el puente
En un tiempo, en un lugar,
Lo verdugos ahora
Visten más a la moda
Y te impiden pensar.
En el puente del Diablo….
Las aguas han pasado
Bajo el puente del Diablo,
Pero nada ha cambiado,
Ya sabes de lo que te hablo.
En el puente del Diablo….
Un pirata camina
Sin cabeza y nos mira
Con su alma rebelde
Y su sangre ha quedado
Desafiando al pasado
En las maderas del puente,
Del Puente del Diablo…
12.
El Mar de mis Dudas
Cuánta agua irá a pasar
Debajo de mi puente
Hasta que ya no deba pensar
Que tengo mala suerte.
Cuántas máscaras debo comprar
Para no tener miedo,
Y en qué tono debo pronunciar
Para decir “no puedo”,
Cuántas frases tengo que mentir
Para creer en mí mismo,
Y ya no sé si debo seguir
Soñando el socialismo.
Sólo soy
Un barco en medio del mar,
Una gaviota que no vuelve
Nunca más.
Siempre me pongo a pensar
Frente al mar de mis dudas
Si me basta solo con llegar
Con las manos desnudas,
Ojalá que no encuentre jamás
Lo que ando buscando,
Viajar siempre me ha gustado más
Que cuando voy llegando.
Soy como un fantasma viejo que
Ya no tiene cadenas
Que arrastrar al paso de sus pies
Para llorar de pena.
Sólo soy
Un barco en medio del mar,
Una gaviota que no vuelve
Nunca más.
13.
Ballade pour mon Pays
De mon pays me reste une lumière
Comme une danse d’abeilles
Qui chante encore dans ma memoire,
De mon pays me reste un bruit de chaines
Ou quelque cri de haine
Qui sort de son historie.
De mon pays me manque la nature,
L’allure de la lune
Que brille sur la baie,
De mon pays me manque a tristesse
Que quelquefois se blesse
Derrière la liberté.
De mon pays me reste une feblesse,
Que comme une caresse
Touche tous mes souvenirs,
De mon pays me reste une musique
Que sans arrêter fabrique
Des paysages dans la nuit.
De mon pays me manque cette aromme
De jasmin que couronne
La nuit de mois de abril,
De mon pays me manque une fenêtre
Por regarde peut-être
Mes outres souvenirs.
De mon pays me reste la certitude
Qu’un très joli prèlude
Ne chanterá pas dans mes éscrits
De mon pays me reste l’histoire lointaine
A savoir que la peine construit cette mèlodie.
De mon pays me manque quelques femmes
Qui regnen sûr mon âme
Et qui m’ont oublié
De mon pays me manque mon enfance,
Le temps de l’esperance
De revoir mon pays.